24.9.23

Indómito semblante

 Habrá sido la crueldad de la vida misma

que le modificó el semblante

Ahora se inclina su mirada altiva


Pierde el temor de su esencia

con desenfadado

mira los astros en lo profundo de un pozo


Pierde el temor al desprestigio y desfalco, 


  no rastrea riqueza; corre con hienas:

un hábito fresco adquirido en el salvajismo 

al dejar la jornada y perseguir el descanso con tanta prisa

 que ni la mente suspende


Ha cambiado, sí

No hay explicación pero ocurrió:

los caídos son los nuevos iniciados

Los locos son las damas creativas de tanto ocio

la balanza de Astrea como subibaja del Olimpo

La injusticia la cantan los vencidos,

los de voces indignadas,

 desestimadas y tibias

Pero fiero, intrusivo el destino le cambió el semblante

del trecho abierto no hay retorno


Al que le brota la psique una vez

 será considerado demente,

siempre indómito en un mundo dormido.

No hay comentarios:

Publicar un comentario